Tras las críticas de la oposición a Montenegro por no adherir todavía al programa provincial, la concejal radical Marianela Romero consideró que el convenio podría implicar “la desfinanciación de nuestro sistema educativo municipal, que es el más grande del país”.
Luego de las críticas que durante las últimas semanas planteó oposición porque el gobierno de Guillermo Montenegro no adhirió todavía al programa provincial “Escuelas a la obra”, la concejal de la Unión Cívica Radical Marianela Romero consideró que el convenio podría implicar “la desfinanciación de nuestro sistema educativo municipal, que es el más grande del país”.
Romero sostuvo que “el convenio establece que la Provincia da asistencia financiera transfiriendo el 15% del presupuesto de la obra al adjudicarse la misma, y luego se va pagando contra certificado de avance de obra realizado por la Subsecretaría de Infraestructura de Educación”.
Sin embargo, la edil radical advirtió que esa asistencia “puede no ser por el total y el complemento debe realizarlo el municipio utilizando el Fondo Educativo Municipal” y que “lo mismo dice para cuándo hubiere atrasos en los pagos, afirmando que los municipios podrán cubrirlo con el Fondo”.
A su entender, la adhesión al convenio implica, entonces, “poner en riesgo nuestro Fondo Educativo” y, por lo tanto, “podría quedar desfinanciado todo el sistema educativo municipal”.
“Lo que nosotros exigimos es la clarificación del convenio, porque si bien en esta circunstancia podría ser razonable realizar la transferencia de obras a los municipios, es inadmisible la omisión de las autoridades de los Consejos Escolares en el referido convenio”, apuntó Romero.
“Su participación es central a los efectos de determinar la prioridad de las obras, para eso han sido electos por nuestros vecinos”, agregó la concejal y seguido señaló: “También la subestimación de los organismos descentralizados de la Dirección General es un error grave a los efectos de la implementación de esta iniciativa”.
Finalmente, la concejal radical explicó que esta decisión implica también un avance sobre la autonomía municipal: “No podemos dejar pasar otro arrebato a la autonomía de nuestro municipio, si se firma el convenio sin plantear algunas reformas que creemos necesarias, la Provincia va a ser una trasferencia de dinero, pero a su vez, va a imponer cómo y en qué invertirlo, sin participación de los genuinos representantes de los marplatenses y batanenses”, concluyó.